Anoche era incapaz de escribir una entrada sobre Marco, pero también era incapaz de pensar en otra cosa. Las palabras que he leído de Rossi hacia Sic, como lo llamaban sus amigos, han hecho que quiera dedicarte unas palabras, aunque no sea capaz de escribir una gran historia.
Creo que hoy todos estamos de acuerdo con Rossi, Marco fue tan duro en la pista como dulce en la vida. Para mi es ridículo desearle a una persona de 24 años que descanse en paz, ¿cómo descansa alguien tan joven? No es justo…
Dicen que el dolor es como el océano: profundo, oscuro, y más grande que nosotros. El océano es callado, perseverante e injusto, tan injusto como la vida misma.
Y hoy sólo quiero despedirme de ti, de ese italiano con pose de estrella del rock…
CIAO MARCO.
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